Tuto Tavárez
SANTIAGO.-Cuando niño, Francisco Peña se ponía los
aperos de receptor de su padre Tony Peña y más que un cátcher, parecía una
versión en miniatura de Robocot.
Con el tiempo, Frank se convirtió en uno de los
mejores receptores de la pelota dominicana y un consentido de los aficionados,
principalmente los niños que gustan jugar la difícil posición, que exige 9
entradas en cuclillas.
La semana pasada, se hizo viral una foto del niño Ivandry
Corniel, recibiendo pelotas con un equipo de cátcher, que él y su amigo Darling
Durán fabricaron con una caja de cartón.
El pasado domingo, Francisco demostró que tiene un
corazón generoso, invitando a Ivandry, su amigo y su madre Reyna Valdez al estadio
Cibao donde compartió alegremente con su admirador.
Ivandry llevó su indumentaria de manufactura propia,
pero Peña se la cambió por una real, de la misma que el utiliza para conducir
el juego detrás del plato.
En Francisco pareció volver el niño que llevamos
dentro y disfrutó en grande, pero como un chiquillo el momento.
Francisco no solamente le regaló el equipo para
receptores, sino que le dio varios consejos y hasta practicó con él en el
terreno de juego.
Ivandry, su amigo Darling y doña Reyna estaban
felices, porque previo a todo, Francisco los había vestido como verdaderos
aguiluchos, con chaquetas del equipo de las Águilas Cibaeñas.
El novicio receptor declaró que su amigo Darling
quería lanzar y él tenía miedo de que la pelota lo golpeara, por lo que se la
ingeniaron para hacer la singular indumentaria.
El terreno fue frente la calzada, frente a su casa
en el sector La Joya, de Santiago de los Caballeros.
La forma cómo iba vestido el receptor llamó la
atención de los transeúntes, que aprovechan las facilidades de los celulares
tomaron varias fotos.
Hoy, Ivandry tiene su equipo de receptor real y
seguro y solo espera ser en el futuro un cátcher como su admirado Francisco Peña.