SANTO DOMINGO -- "Venir de la banca o ser el estelar no es el problema que me detendrá. Yo saldré a la cancha a dar lo mejor de mí, en cada tiro, en cada pase, en cada jugada que esté involucrado".
El delantero dominicano Francisco García se confiesa ante sí mismo y declara que ha trabajado para lograr el mejor año de su carrera y llevar a los Kings de Sacramento lo más lejos posible.
Sacramento abre su campaña hoy en la NBA ante los Timberwolves de Minnesota.
García, de 6-7 de estatura y 200 libras, está proyectado para iniciar la temporada saliendo desde el banco, un estatus que no desconcentra en lo más mínimo al destacado "swingman" de los Kings.
"Viniendo o no de la banca, estoy enfocado en tener una gran temporada, en marcar en cada oportunidad", expresó el jugador a través de un documento de prensa. "Me preparé lo suficiente en esta temporada muerta para ayudar a mi equipo de la manera que sea y gracias a Dios estoy en buena forma física en estos momentos, porque sé que esta temporada será crucial para nosotros".
El capitán del equipo de la capital de California, que saldrá en el quinteto abridor esta noche ante los Timberwolves, reveló que el dirigente Paul Westphal habló varias veces con él para justificar la decisión.
"Él habló conmigo muchas veces y me dijo que me quería desde el banco porque no tenía a nadie que saliera a anotar de inmediato", dijo. "Es algo que me complace porque es una muestra del gran respeto que él me tiene".
García, que entrará a su sexta temporada en la NBA, promedió 8.8 puntos por encuentro la estación pasada, en la que apenas jugó 25 partidos debido a una lesión en el antebrazo derecho que tuvo que ser intervenida quirúrgicamente.
"Cisco, como le apodan en Sacramento, confía en que este será un año exitoso para los Kings, que concluyeron la edición de 2009-10 en el sótano de la División Pacífico de la Conferencia Oeste con marca 25-57.
"Pienso que somos un buen equipo, lucimos muy bien en esta pretemporada y me parece que estos jóvenes nos ayudarán a llegar muy lejos", apuntó el egresado de la universidad de Louisville. "Ahora somos más altos, más físicos y con jugadores más experimentados y, si nos mantenemos jugando juntos, tenemos un buen chance de clasificar".
El delantero dominicano Francisco García se confiesa ante sí mismo y declara que ha trabajado para lograr el mejor año de su carrera y llevar a los Kings de Sacramento lo más lejos posible.
Sacramento abre su campaña hoy en la NBA ante los Timberwolves de Minnesota.
García, de 6-7 de estatura y 200 libras, está proyectado para iniciar la temporada saliendo desde el banco, un estatus que no desconcentra en lo más mínimo al destacado "swingman" de los Kings.
"Viniendo o no de la banca, estoy enfocado en tener una gran temporada, en marcar en cada oportunidad", expresó el jugador a través de un documento de prensa. "Me preparé lo suficiente en esta temporada muerta para ayudar a mi equipo de la manera que sea y gracias a Dios estoy en buena forma física en estos momentos, porque sé que esta temporada será crucial para nosotros".
El capitán del equipo de la capital de California, que saldrá en el quinteto abridor esta noche ante los Timberwolves, reveló que el dirigente Paul Westphal habló varias veces con él para justificar la decisión.
"Él habló conmigo muchas veces y me dijo que me quería desde el banco porque no tenía a nadie que saliera a anotar de inmediato", dijo. "Es algo que me complace porque es una muestra del gran respeto que él me tiene".
García, que entrará a su sexta temporada en la NBA, promedió 8.8 puntos por encuentro la estación pasada, en la que apenas jugó 25 partidos debido a una lesión en el antebrazo derecho que tuvo que ser intervenida quirúrgicamente.
"Cisco, como le apodan en Sacramento, confía en que este será un año exitoso para los Kings, que concluyeron la edición de 2009-10 en el sótano de la División Pacífico de la Conferencia Oeste con marca 25-57.
"Pienso que somos un buen equipo, lucimos muy bien en esta pretemporada y me parece que estos jóvenes nos ayudarán a llegar muy lejos", apuntó el egresado de la universidad de Louisville. "Ahora somos más altos, más físicos y con jugadores más experimentados y, si nos mantenemos jugando juntos, tenemos un buen chance de clasificar".